“Estrategiza más. Replantea todo. Olvida comer.”
Estos monstruos son gremlins lógicos con diagramas existenciales—pensadores intensos que sobreanalizan por diversión, planean escenarios apocalípticos durante el brunch y desarrollan vínculos emocionales con sistemas abstractos. No son fríos—solo están distraídos con las 17 simulaciones mentales que corren en su cabeza. Si les preguntas cómo se sienten, te darán una metáfora, un diagrama o un encogimiento de hombros que, de alguna forma, lo dice todo.
Los ENTP son las ventiscas de ideas del clan Thinkerdinks—hablan rápido, piensan más rápido y están a medio camino de cinco proyectos que tal vez ni existen. Les gusta hacerle agujeros a la lógica, no para destruirla, sino para ver qué cosas raras caen de ahí. Fizzlepuff no cree en “demasiadas ideas”—solo en “muy pocos pizarrones”.
Dentro de los Thinkerdinks, los ENTP traen innovación con una pizca de caos. Cuestionan cada suposición (incluyendo las suyas), y prefieren estar equivocados de forma fascinante que tener razón de forma aburrida. Son caos—pero versión intelectual.